Asador Artetxe - Bilbao

Pescado y marisco a la sombra de una parra en Artetxe (Bilbao)

Los responsables de El Túnel de Mioño regentan un asador con vistas sobre Bilbao y un recetario clásico aliñado con buen género

Comer al aire libre en la terraza del asador Artetxe de Artxanda, a la sombra refrescante de las parras y con Bilbao a los pies, es una experiencia que nadie debería perderse. Han pasado diez años desde que José Manuel Moreno, a quien siempre le gustó cocinar aunque antes de dedicarse a la hostelería trabajó como representante de una empresa del sector de alimentación, y su mujer, la magnífica cocinera Mari Ángeles González, se hicieran cargo del asador situado en el alto de Artxanda.

Ambos regentaron anteriormente el asador El Túnel (Mioño), que desde su fundación en 1989 y durante dos décadas fue uno de los locales más visitados por los vizcaínos amantes de la buena mesa. En el Artetxe, que cuenta con dos comedores en el interior para 50 y 25 personas y una terraza al aire libre con capacidad para 60, apuestan decididamente por las carnes y los pescados de calidad.

La fiesta gastronómica, que incluye varios estupendos menús, comienza con un aperitivo como el bocado de bonito y anchoa en salazón o el tomate de temporada troceado con aceite y sal. No hay que perderse los garbanzos con bogavante, uno de los platos estrella de la casa, las rabas de calamar, el pulpo con un toque de brasa, las deliciosas almejas a la marinera con alcachofas en salsa roja ligeramente picante o el bogavante frito, que cocinan con muy poco aceite, ajo y guindilla. El crustáceo llega a la mesa troceado y está para chuparse los dedos.

Para continuar, otro de los platos que triunfan entre los clientes: cogote de merluza con patata panadera, zanahorias baby y el clásico refrito. Y si no, cualquiera de sus pescados, rape, besugo o lubina en piezas grandes perfectas para compartir. Los carnívoros se decantarán por el chuletón de ganado mayor, que sirven sobre una parrilla, tierno, riquísimo y acompañado de patatas fritas y pimientos verdes.

Dejen un hueco para el postre y disfruten con la tarta de queso, insuperable, y con la torrija de pan, que hacen como toda la vida, mojando el pan durante 48 horas en leche. Tiene una interesante carta de vinos.

Domicilio: Camino Berriz, 110

El Correo