Patricia Galo. Mariscos, espetos de sardina, paella... hay variedad para todos los gustos. Lleva 27 años abierto: recuerdan padres que iban sin niños antes de nacer y ahora vienen con ellos. Así dicen tener clientes fijos y otra que se hace día a día. Se encuentra a pie de playa. Han tratado de desarrollar un servicio familiar con sus clientes. Otro ejemplo es el de Miguel Ruiz, que lo vota por la "relación calidad precio, difícil de igualar".
La Opinión
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